¿Quién no se ha quedado con cara de póker al escuchar el término coworking por primera vez? Tranquilo, te comprendemos, ¡a nosotros también nos pasó la primera vez que lo oímos!
El coworking es una práctica cada vez más habitual entre las empresas y, lo cierto, es que se ha vuelto muy popular en los últimos años con la expansión del teletrabajo, siendo una de las opciones preferidas por las compañías.
Repasamos todo lo que necesitas saber sobre esta nueva forma de trabajo que ha llegado para quedarse. ¡Vamos a ello! Coworking: qué es y cómo funciona.
¿Qué es el coworking?
El concepto de coworking se ha extendido de forma masiva a lo largo de nuestro país y de toda Europa, pero ¿cuál es su significado realmente? ¿Qué lo diferencia de una oficina convencional? Cuando hablamos de una oficina tradicional, hacemos referencia a un espacio de trabajo exclusivo para una empresa, en alquiler o de compra, donde todo es gestionado por el propio usuario. La principal diferencia está en que la gente que está en un coworking no pertenece al mismo negocio, incluso muchos no tienen empresa y son autónomos o freelance.
El coworking se ha convertido en una solución para aquellas personas que trabajan en remoto y quieren recuperar ese contacto social que el teletrabajo limita. También cubre la necesidad de contar con una oficina con todas las comodidades imprescindibles para realizar las actividades propias de un negocio, sin tener que pagar un alquiler por una oficina.
Ventajas del coworking
El modelo de trabajo coworking presenta una larga lista de ventajas, entre las que destacamos:
Flexibilidad de horarios
Posibilidad de emprender
Ahorro de costes
Aumento de la productividad
¿Cómo funciona un coworking? Coworking como modelo de negocio
Ahora que tenemos claro que es el coworking, solo nos queda una duda: ¿cómo funciona? Cada persona interesada en formar parte del coworking tendrá un contrato flexible de alquiler. El pago se ajustará según la duración del contrato, la cantidad de puestos a reservar y el tipo de puesto reservado.
Este espacio de trabajo compartido consta de los siguientes servicios:
- Acceso a zonas de trabajo perfectamente equipadas.
- Salas de reuniones con equipamiento audiovisual.
- Zonas y servicios comunes: cocina, baños, terraza, café y té…
- Actividades colectivas: talleres, charlas, eventos, aperitivos, desayunos…
- Domicilio social, fiscal y administrativo.
- Internet por cable de alta velocidad y wifi.
- Taquillas y almacenamiento
- Servicios de impresión y reprografía
Además, los espacios de coworking deben contar con un gestor de espacio o community builder, encargado de velar por la comunidad.
En esencia el coworking es un lugar donde hay personas de diferentes ámbitos profesionales, empresas, culturas…, pero no solo comparten espacio, también ideas y proyectos.
Sabemos que esta práctica no es para todo el mundo. Si te gusta el silencio, la soledad y la privacidad, sentimos comunicarte que el coworking no es para ti. ¿Eres de los que prefiere quedarse teletrabajando desde casa o te gusta salir a trabajar, compartir experiencias y conocer gente nueva?
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