El Síndrome de Burnout no afecta igual a todos los empleados. Los signos de agotamiento en los trabajadores no siempre coinciden, pero hay señales de burnout a las que hay que prestar atención.
¿Qué es el síndrome de burnout? Causas y síntomas del síndrome de burnout
Burnout: exposición prolongada a factores estresantes emocionales e interpersonales crónicos en el trabajo que provocan el desgaste y agotamiento del empleado, especialmente por el exceso de trabajo. Esto es el síndrome de burnout.
El “síndrome del trabajador quemado” está ya reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una enfermedad, siendo motivo de reconocimiento de baja o ausencia laboral.
Son varios los factores que contribuyen al aumento de los trabajadores que sufren el síndrome de burnout. Desde los cambios legislativos y gubernamentales que afectan al ámbito laboral, hasta la pandemia pasada o el cambio hacia un modelo de trabajo híbrido.
Los factores estresantes a los que se enfrenta diariamente un trabajador pueden pesar mucho en su día a día. Uno de los mayores desafíos en el bienestar laboral es reconocer cuándo un empleado está sufriendo el síndrome de burnout.
Señales de burnout: cómo detectar el agotamiento en los empleados
Hay tres elementos clave que debemos observar y analizar para detectar el síndrome de burnout en los trabajadores: el agotamiento mental, el agotamiento físico y la desconexión.
Agotamiento mental
El estrés laboral y la sensación de saturación en el trabajo es bastante común hoy en día. También es habitual en la cultura actual asumir esto y no hablar sobre el bienestar emocional y la salud mental para no parecer débil.
De hecho, es normal presumir de lo ocupado y estresado que se está como un símbolo de éxito. Pero, por suerte, esto está empezando a cambiar. A medida que los empleados llegan a un punto crítico, hay señales de advertencia que pueden alertar a los responsables para actuar a tiempo.
Las personas que padecen síndrome de burnout pueden parecer tristes. Esta tristeza no se manifiesta solo durante unas horas o uno o dos días, sino que se trata de una tristeza prolongada en el tiempo.
También entra en juego la soledad. La soledad crónica y la falta de inclusión puede llevar a los empleados al límite. Igualmente hay que fijarse en la ansiedad del empleado y en cambios emocionales como la ira o la desesperación. Todo esto son señales de burnout en el empleado.
Agotamiento físico
Al igual que el agotamiento mental, las señales físicas también se notan si prestas atención. Los cambios bruscos de peso, la falta de sueño o las bajas por enfermedad son indicadores que pueden ocultar a un empleado quemado, agotado y estresado.
En cualquier caso, la clave está en tomar esa información y usarla para hablar e intentar ayudar al trabajador con sus problemas.
Desconexión
Una de las señales más visibles del síndrome de burnout es la desconexión en el trabajo. Si detectas a un empleado que se aleja del equipo o se escabulle de los planes en grupo, presta atención.
Cuando los empleados llegan a su límite mental y físico, suceden varias cosas: la salud y el rendimiento laboral se resienten y, como consecuencia final, el empleado se marcha. Si no se detecta a tiempo, es muy difícil evitar que el empleado se vaya. Y con cada empleado quemado que se va, se acumula más trabajo y presión para los que quedan, lo que puede desencadenar un efecto dominó desastroso.
La importancia del bienestar laboral
Es fundamental que los responsables de equipo, líderes y el departamento de Recursos Humanos de la empresa consigan detectar el agotamiento y el estrés en los empleados para evitar y solventar cualquier posibilidad de que las cosas empeoren.
El bienestar laboral debe ser hoy una prioridad para cualquier empresa. Trabajarlo y reforzarlo en la empresa traerá numerosas ventajas tanto para los empleados como para la compañía.
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